Iniciar una relación de amigos con derechos puede ser genial. Después de todo, es una conexión sin condiciones entre dos personas que realmente se aprecian y confían entre sí. Pero, por supuesto, eso no significa necesariamente que sea sencillo.
Es difícil establecer un conjunto claro de reglas para ser amigo con beneficios ya que cada situación es diferente. Pero hay una cosa que todas estas relaciones tienen en común: la necesidad de una buena comunicación.
Siempre es una buena idea hablar sobre cuáles son las expectativas, e incluso establecer algunas pautas sobre lo que va a pasar antes de que las cosas sucedan.
La verdad, no es que sea una conversación agradable, pero es muy práctico. Las cosas pueden complicarse si ambas partes están en cosas distintas.
Aprende a surfear sin dramas por este tipo de relaciones.
Sé claro sobre lo que estás buscando.
Siempre que decidas las reglas en una relación de amigos con derechos, es mejor ser lo más transparente posible, abierto a compromisos y nunca juzgar o hacer que la conversación sea unilateral. Ten la conversación en un ambiente neutral y sé honesto y cuidadoso.
Tratar de tener una relación de amigos con derechos no significa que tengas que ir a la moda y hacer lo que tu pareja quiere. Habla por ti mismo y aboga por lo que quieres también.
No esperes que se convierta en una relación.
Asegúrate de estar bien con que lo vuestro sea exactamente lo que es y nada más. Es importante ser consciente de las propias intenciones y sentimientos cuando se llega a un acuerdo como este.
Comprueba de forma intermitente cómo te sientes.
Haz saber a tu amigo con beneficios que quieres asegurarte de que los dos estáis en lo mismo. Es importante para asegurarse de no herir los sentimientos del otro en el futuro.
Si en algún momento te diviertes demasiado y quieres pasar más tiempo con tu amiga con derechos, entonces puede ser el momento de reevaluar la situación. Si te apegas demasiado, entonces es hora de tener una conversación.
Trata de leer también los sentimientos de tu pareja.
Este tipo de conversaciones -”Hey, sólo quiero hablar contigo sobre cómo van las cosas entre nosotros”- puede ayudar a prevenir futuros colapsos y también fortalecerá la amistad, la confianza y la vulnerabilidad entre vosotros.
Además, evitará que una persona sienta más cosas en relación más que la otra. Si las emociones evolucionan para uno o los dos, mantén la conversación nuevamente y reevalúa tu relación de de amigos con derechos. Dado que una relación de este tipo puede cambiar más rápido que inmediatamente, hay que hablar mucho si no quieres que las cosas te tomen por sorpresa. O por asalto.
Habla sobre si vais a mostrar vuestra relación.
Asegúrate de diseñar tu estrategia de relaciones públicas, especialmente si formáis parte del mismo grupo de amigos. ¿Lo estáis manteniendo en secreto? ¿Vais a ser abiertos al respecto la próxima vez que estéis todos en el bar y vosotros dos os vayáis juntos a casa?
Establece algunas reglas básicas.
¿Os podéis quedar a dormir después de hacerlo? ¿Hace falta conocer amigos en común? ¿Familia? ¿Va a ser una relación secreta? ¿Podéis veros “x” veces al mes o no hay una cifra concreta? Saber todo ese tipo de cosas es importante si no queréis cortar la relación antes de que empiece.
Establece dónde dibujar la línea.
Incluso si estás teniendo los mejores orgasmos de tu vida, eso no significa que estás teniendo una relación de pareja. Y es que, normalmente, se tiene este tipo de relaciones para evitar las charlas de almohada y pasar tiempo juntos al margen del sexo.
En una relación así no se está construyendo algo íntimo, sino que ambos, están simplemente divirtiéndose y disfrutando físicamente.
Reconoce tu propia zona de confort.
El hecho de que lo mantengas informal no significa que tenga que ser complaciente cuando se trata de líneas rojas y consentir:
Asegúrate de usar protección.
Dependiendo de las expectativas que hayas generado, cualquiera de los dos podría estar teniendo relaciones con varias personas. ¡Y eso es genial! Simplemente asegúrate de tomar precauciones. Por ejemplo, para cualquier tipo de relación continua no exclusiva, asegúrate de haceros pruebas de ETS.
Si bien hay muchas relaciones casuales, solo el 6 por ciento de los que afirman haberla tenido dice haber tenido una relación casual con una sola pareja. Entonces, si estás con más de una, definitivamente debes informar a tu nueva follamiga y, por supuesto, usar condones cada vez que lo hagáis.
Hablad sobre cómo va a terminar.
Es mucho mejor hablar sobre el final antes de que suceda. ¿Qué pasa si conocen a alguien con quien quieren ser exclusivos? ¿Y si lo haces? ¿Y qué pasa si alguien decide que ya no está interesado? Puede ser difícil visualizar el final de algo, pero ahorrará mucho dolor al reconocer que podría no durar para siempre desde el principio. Haz saber que planeas hablar al respecto si conoces a alguien más, y que ella debería sentirse libre de hacer lo mismo. De esa manera, corréis menos riesgo de dañar la amistad cuando suceda.
Y, por supuesto, asegúrate de que sea divertido.
A pesar de todos los horrores pandémicos de la situación actual, es genial es que poder tener relaciones sexuales consentidas con quien queramos, cuando lo deseemos, si las circunstancias lo permiten.
El sexo puede ser una excelente manera de desestresarse, tiene sorprendentes beneficios para la salud y la belleza, y es muy divertido.
En ese sentido es muy útil apuntarse a una página de contactos, porque vas a tener miles y miles de oportunidades a un sólo click. Eso sí, la diversión tiene que ser el primer objetivo. Si la cosa se pone demasiado seria en algún sentido es hora de pasar a otra cosa. O de contactar con otro perfil, el el hipotético caso de que sólo estés hablando con una.
¿Tu situación de amigos con beneficios deja de ser divertida? Córtala. Eso, después de todo, es la verdadera belleza del arreglo informal.
Esta genial el post. Un cordial saludo.