El amor verdadero existe, dependiendo de lo que entendamos por amor. Y ya aquí -en la primera línea del artículo- la cosa se complica.
¿Qué es el amor?
El amor es muy difícil de definir. Una de esas palabras con definiciones sospechosamente largas, como vida o libertad.
Supongo que sucede lo mismo con todas las palabras importantes.
Veamos lo que dice Wikipedia:
amor
Del lat. amor, -ōris.
1. m. Sentimiento intenso del ser humano que, partiendo de su propia insuficiencia, necesita y busca el encuentro y unión con otro ser.
2. m. Sentimiento hacia otra persona que naturalmente nos atrae y que, procurando reciprocidad en el deseo de unión, nos completa, alegra y da energía para convivir, comunicarnos y crear.
3. m. Sentimiento de afecto, inclinación y entrega a alguien o algo.
4. m. Tendencia a la unión sexual.
La primera no me gusta. Las otras me parecen incompletas. ¿El ser humano insuficiente en sí mismo? ¿O sea que sin otra persona no estamos completos? Esto es completamente falso; entronca con la versión romántica del amor que nos han vendido los juglares modernos.
Lo que sucede es que la versión romántica del amor cambia de época en época.
Hoy en día el amor es algo que excede nuestra voluntad. Es un sentimiento que no podemos controlar, pero en el S. XIX, por ejemplo, las personas buscaban la virtud y los valores morales públicos en el amor.
“El cortejo amoroso se inscribía dentro de unas reglas morales y sociales que aunque hoy las podamos ver como anticuadas ordenaban las relaciones y propiciaban que todos supieran lo que estaba permitido y lo que no”.
Eva Illouz (Marruecos, 1961).
En la época premoderna el amor estaba sujeto a unas normas de conducta y eso lo mantenía bajo control.
Illouz pone un ejemplo maravilloso:
“Elinor Dashwood, heroina de Sentido y sensibilidad (1811), está enamorada de Edward Farrars. Sin embargo, una vez que se ha enamorado de él, descubre que está comprometido en secreto con otra mujer, llamada Lucy.
Más adelante, cuando le dicen que Edward no ha roto su compromiso con Lucy (o sea, que está por casarse), se regocija por la entereza moral de su amado, porque incumplir las promesas que le hizo a la otra mujer lo habría transformado en un hombre moralmente indigno.
Resulta evidente que la lealtad de Elinor a sus principios morales tiene prioridad sobre el amor que siente por Edward, del mismo modo que el compromiso de Edward con Lucy debe tener prioridad sobre lo que él siente por Elinor.
Ahora bien, los personajes de Austen no se comportan como si existiera un conflicto entre su sentido del deber moral y sus pasiones. De hecho, no existe tal conflicto en su conducta «porque toda la personalidad se encuentra integrada» (*).
En otras palabras, es imposible separar lo moral de lo emocional, porque la dimensión moral es la que organiza la vida emocional, que por lo tanto también reviste aquí una dimensión pública” (Pág. 40)
(*) O. J. Cockshut, Man and Woman: A Study of Love and the Novel, 1740 – 1940, Oxford University Press, 1978, page 67.
Ahora, en pleno posmodernismo, los amantes se preguntan más cómo hacer un trío que cómo saber si tu futura esposa es virgen.
Diez cosas que debes saber sobre el amor verdadero
1. Es posible amar a alguien que no te ama. No es un amor pleno, no tiene mucha profundidad, pero ahí está.
2. La gente siempre dice que tienes que amarte a ti mismo antes de que nadie más pueda amarte, pero eso no es cierto. Puedes ser amado incluso si te odias a ti mismo. Simplemente, no va a ser un amor sano.
3. Amar no significa necesitar, sino preferir. Si necesitas, dependes. La dependencia no es amor.
4. La pareja perfecta no significa que no tiene problemas, sino que se enfrenta a ellos e intenta solucionarlos en equipo
5. Es doloroso haber amado a alguien una vez y no volver a experimentarlo nunca más. Si esa es tu situación es probable que desees no haber amado nunca.
6. Luego recuerdas la cita «es mejor haber amado y haber sufrido una ruptura de pareja que no haber amado nunca».
7. Nunca amarás a alguien como la primera vez.
8. En la mayoría de los casos, esto es bueno. La primera vez es una locura.
9. Es un momento maravilloso cuando te das cuenta de que eres alguien a quien vale la pena amar.
10. No puedes obligarte a amar a alguien. Si el amor no está ahí, no pasará. Nunca.
Cómo reconocer al amor de tu vida
Fácil. El amor de tu vida es la persona de la que estás enamorado en este momento.
Otra cosa es que eso acabe más pronto que tarde, pero, en el momento en que te enamoras de alguien, quieres estar con esa persona el resto de tu vida.
Así que no se trata tanto de reconocer al amor de tu vida sino de reconocer al que no será el amor de tu vida.
Es un tema complejo. Muchas personas mantienen una relación por muchos motivos antes que el amor.
- Miedo a la soledad.
- Por miedo a romper.
- Miedo al qué dirán.
Ni que decir tiene que estar con alguien por miedo a otra cosa es la peor manera de estar con alguien.
Cómo saber si el amor es correspondido
Para saber si el amor es mutuo lo mejor es amar bien. Si tu amas bien a tu pareja y lo sabes, enseguida verás si eres correspondido de la misma manera.
Y ¿en qué consiste amar bien?
Amar bien se basa en una cosa: dar. En procurar la felicidad de la otra persona sin sacrificar la tuya. Si eso pasa, si tienes que ceder parte de tu felicidad para que tu pareja sea un poco más feliz, hay un desequilibrio.
Amar bien consiste en desear lo que ya se tiene.
Así que si tu pareja no te hace feliz, o tú no haces feliz a tu pareja, hay una falta de correspondencia.
Ojo, es normal que en una relación larga haya momentos donde sucede esto. En todas las relaciones hay altibajos y eso no quiere decir que no haya amor verdadero.
En realidad, es fácil ver si la relación va bien o mal: mide el tiempo que lo pasáis bien y haz lo mismo al contrario, cuando lo pasáis mal. Si el segundo caso gana al primero durante un tiempo más o menos largo, a lo mejor debes empezar a pensar cómo cortar con tu novia o novio.
En cuanto a los amores no correspondidos desde el principio. En fin, si estás en esa situación te deseo lo mejor, pero vas a pasarlo mal. Al principio desearás saber como superar ese amor imposible, pero no obtendrás respuestas.
Sólo el tiempo te las dará.
¿El amor verdadero nunca muere?
Vaya que si muere. Y tanto. He visto amores frescos y alegres secarse como el agua de un pozo olvidado en el desierto.
Las personas que se aman toda la vida lo hacen con trabajo, esfuerzo y dedicación. Pero la tormenta química cerebral que sientes cuando te enamoras desaparece pronto, se va estabilizando y da paso a otro tipo de pacto. El de la costumbre bien entendida, el del espíritu de equipo, el pacto de la complicidad absoluta.
La sensualidad y el deseo, que saltaban encabritados en los primeros años, dejan paso al recio andar del animal domado, más no apesebrado.
Hay amores que no mueren, es verdad.
Pero porque hay algo más que amor en ellos.
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